El grupo de vecinas y vecinos implicados en los procesos de recuperación de la memoria de los barrios de barracas de l’Hospitalet ha sido reducido pero constante, y su implicación ha permitido reunir en eventos puntuales a un gran número de sus convecinas. Su papel ha sido fundamental a la hora de recuperar, ordenar y transmitir esa memoria colectiva, y de construir un relato y una mirada alternativos sobre la ciudad.
En Barcelona y su área metropolitana, la erradicación de los barrios informales a lo largo del siglo XX, especialmente a partir de los años 70 y 80, supuso la disgregación de sus habitantes en distintos barrios de la periferia urbana. Pocas fueron las barriadas de barracas que consiguieron que las autoridades forzasen la construcción de sus nuevas viviendas en los mismos emplazamientos en los que se ubicaran sus barracas.
En la zona sur de la Gran Via, en el término municipal de l’Hospitalet, se dio la circunstancia de que muchos de los habitantes de barriadas como Can Pi o La Bomba, fueran reubicados en los vecinos polígonos de vivienda de Bellvitge y Gornal, construidos en los años 60 y 70. Esta circunstancia ha facilitado contactar con muchas y muchos de aquellos vecinos que, además, han mantenido viva la memoria de su experiencia al encontrarse cotidianamente en el barrio y compartir recuerdos y vivencias.