Última noticia que publicamos con retraso, lo juro. A principio de este mes se celebró en Madrid el primer Congreso Innovación Educativa que reunió a representantes de los centros y entidades que forman parte del portal/red Innova, impulsado por Mariano Fernández Enguita desde el Departamento de Sociología de la Universidad de Salamanca. Leyendo el artículo que publica El País encontramos afinidad con algunas de las críticas y las propuestas que se mencionan; por ejemplo la idea de que innovar en la escuela implica batirse «contra estructuras organizativas e inercias que datan del siglo XIX» o la imposibilidad de movilizar a un profesorado y a unos equipos directivos que se conforman con mantener un status quo relativamente confortable. Sin embargo, y sin querer prejuzgar, cabría examinar con lupa qué entienden por «creatividad» e «innovación» las organizaciones que forman parte de Innova. De entrada encontramos que buena parte de los proyectos publicados en el portal se incluyen en el ámbito de la educación en valores, educación para la ciudadanía, educación para la democracia… Un ejemplo representativo y no queremos ser malos ni nada por el estilo: Educreación. Pasamos del mural por la paz con manos blancas estampadas en papel de embalar al videoclip de una canción por la paz realizado con el móvil ¿esto es innovación realmente?. Claro que, no podemos olvidar que nos desenvolvemos en un campo en el que el hecho de que los alumnos «se sienten en círculo alrededor del profesor» es aún algo destacable…