El Martinet es defineix com a lloc dʼaprenentatge i de cultura, i organitza els seus espais i recursos per tal que els processos dʼaprenentatge siguin possibles. Sota aquesta intenció ha procurat projectar una proposta educativa vinculada a les diferents etapes de creixement de l’infant sempre en la direcció d’oferir un entorn que obri oportunitats d’aprenentatge múltiples i diverses.
Justamente para responder a las necesidades específicas de desarrollo de las diferentes edades de los niños, la escuela tiene una estructura de cuatro comunidades: la de los pequeños, la de los medios, la de los mayores y la de los mayores. Cada comunidad incluye a los niños de tres edades consecutivas y un equipo de maestros. Así pues, el equipo de la escuela se distribuye en cuatro grupos de trabajo facilitando así que sus miradas y cuidados puedan centrarse en los niños de la comunidad donde están ubicados.
La escuela partimos de una visión de niño capaz y competente, deseoso de aprender y relacionarse con los demás y el mundo. Así pues, procuran crear situaciones reales de aprendizaje en las que el niño se sienta invitado al reto, a hacerse nuevas preguntas ya investigar para aprender. Aprender se vincula con el bienestar y la responsabilidad, por tanto, se busca construir conjuntamente con los niños una cultura de aprendizaje ligada al compromiso hacia el mundo. Los distintos saberes y lenguajes nos dan herramientas y estrategias para actuar y comprender.
En la escuela se ven habitualmente a los niños y niñas en pequeños grupos, en parejas haciendo sus investigaciones, ya que el aprender, a pesar de ser un proceso interno, se construye siempre con los demás. De modo que en un mismo tiempo y en un mismo espacio pueden llegar a pasar a la vez cosas muy diversas.