La cocina es un espacio cotidiano en el que aparentemente suceden cosas sin importancia. Sin embargo, se trata de un lugar complejo, en el que se realiza una actividad imprescindible para el sostenimiento de la vida, en el que se transmiten y producen saberes, intercambios económicos, energéticos, simbólicos… atravesado también por violencias que son de orden político. En definitiva, la cocina es un lugar complejo en el que se dan y que participa de relaciones y procesos ecosociales, culturales y económicos sobre los que podemos pensar e intervenir en la práctica para explicarnos mejor el mundo que nos rodea.
LaFundició, en colaboración con la artista
Marina Monsonís, impulsamos
Conserves litorals, un espacio en el que no sólo aprender a cocinar, sino en el que reflexionar, intervenir en el territorio y tramar vínculos comunitarios desde la cocina, la gastronomía y los alimentos.
Empezamos el próximo
miércoles 7 de octubre de 17 a 19 h en
Prado 11, el espacio de LaFundició en
Bellvitge (c. Prat, 11 baixos, L’Hospitalet) aprendiendo a hacer harina de algarroba.