Mariló lanzando rayos psicotrónicos al incauto invitado
Este fin de semana visitó la sede de LaFundició nuestro amigo Antonio Collados para explicarnos algunas cosas sobre Aulabierta, experiencia de la que es uno de los principales artífices; la charla fue muy interesante, comentamos algunas de las similitudes y diferencias con projecte3* y acabamos hablando sobre la vida del trabajador cultural… todo esto mientras nos merendábamos un delicioso pastel de zanahoria cortesía de Mariló. La entrevista, que podéis leer a continuación, aparecerá publicada también en un fanzine que estamos preparando sobre projecte3* y en el que también se publicarán textos de los estudiantes del IES Joanot Martorell, Catarqsis, Santiago Cirugeda, Javier Rodrigo… y en el que contaremos con la aparición estelar de Peter McLaren!!, pero de esto ya informaremos en su debido momento. La entrevista, después del link.
Francisco: Como esta entrevista es para el fanzine, comentar qué es Aulabierta y cómo surgió la necesidad de empezar Aulabierta ¿o es demasiado formal esto? Para quien no sepa qué es Aulabierta ¿no?
Antonio: Discutid un poco si queréis las preguntillas… Aulabierta es, yo creo, una experiencia de construcción de una comunidad de aprendizaje, autogestionada, dentro de la Universidad por los propios estudiantes y surge hace ya tres años en otoño de 2004 a raíz de alguno de los condicionantes de la propia facultad: la ausencia de lugares de encuentro, más allá de los estrictamente programados para la docencia reglada; espacios donde gente que entiende su aprendizaje de una forma más abierta pudiera llegar a encontrarse, a plantear proyectos en grupo y un poco a cuestionarse cual es el modelo de estructura reglada y de que manera ellos podrían llegar a intervenir desde dentro, con su propio deseo como motor de aprendizaje, que es uno de los objetivos del proyecto.
Mariló: ¿No hay ningún espacio, no había ningún espacio dentro de la facultad que vosotros pudierais utilizar?
F: A parte del bar.
A: Bueno, siempre hablábamos de esto, de cómo cafetería y biblioteca eran dos lugares de encuentro, o dos lugares que lo propiciaban pero siempre decíamos que lo que queríamos construir era un espacio intermedio o sea, un lugar abierto como una cafetería pero sin el ruido de la cafetería y un lugar como una biblioteca, con la información de una biblioteca pero sin el silencio de una biblioteca. No hay lugares así en la Facultad de BB.AA de Granada, aunque en unas instalaciones tan caóticas como las suyas si que pueda llegar a aflorar algún espacio de este tipo. No hay ninguno diseñado por la institución para tal fin. En origen Aulabierta era más bien un espacio abstracto, un espacio de encuentro, no se planteaba como algo físico, era un espacio que se podía dar en cualquier lugar…
F: Es que yo también me hago la pregunta de si realmente hace falta ‘construir’ algo para construir Aulabierta o para construir el Espai3*, es que a lo mejor te puedes apropiar de un espacio que ya existe.
A: Yo creo que sí, en realidad nosotros empezamos, el proyecto comienza sin plantearnos la autoconstrucción, el encuentro se puede dar a raíz de la organización de un seminario o, imagínate, en la forma de una beca de verano, o de unas conversaciones de bar programadas o sin programar, en una cafetería; lo que pasa también es que en aquellos momentos conocíamos la obra de Santiago Cirugeda con el que vosotros estáis trabajando también, y veíamos muchas de las potencialidades que podía tener la arquitectura. El hecho de que nosotros diésemos el paso de construir físicamente el espacio es porque esta estructura podía convertirse en un signo del proyecto, creíamos que a través del proyecto de autoconstrucción la iniciativa iba a ser mucho más rica y visible.
F: ¿En un símbolo?
A: Sí, bueno, símbolo es que…
F: ¿Es demasiado?
A: A posteriori. Signo es como el ‘tag’, digamos “lo puedo entender, estáis hablando de espacio”, es una relación inmediata “eso es un espacio”. A parte casi todos en la asociación somos creadores visuales o arquitectos y como que hay cierto gusto en la producción, en la materialización de estas cosas y aunque el desgaste de construir un espacio es brutal, incluso puede llevar… bueno, creo que de esto sabemos las dos iniciativas bastante, puede generar momentos en que no produzca energía positiva, lo que pasa es que, al fin y al cabo, desde el principio sabíamos que apostar por la autoconstrucción ayudaría a crear comunidad, este es un proyecto que requiere la participación de mucha gente para hacerlo posible, para llegar a construirlo y eso genera unas relaciones que al final son muy sólidas. Yo que sé, como que al final el trabajo ese físico nos ha dignificado [ríe] y nos ha conseguido ligar como grupo.. También había mucha influencia de Santi en esto, desde el principio entró en el proyecto y es un arquitecto que entiende que la arquitectura puede modificar los… o sea el hecho de plantear o de diseñar una arquitectura distinta a la vez puede provocar formas de vivir distintas, o sea que también motiva comportamientos no habituales dentro de la institución; ya habéis visto, Aulabierta se coloca dentro de un terreno que es universitario pero hay cosas que no prevee lo reglado, la propia Universidad, cosas que se están dando desde Aulabierta. De hecho esta es la sospecha que pueda tener la institución, sobre ese proyecto… de repente es sospechosa la autogestión, por mucho que la tenga dentro de sus objetivos. Todo aquello que no está reglado y que no es previsible es sospechoso.
M: Pero sí os dieron permiso para construir ahí, en ese suelo.
A: Esto es muy conflictivo. [risa general] Esta es una pregunta…
M: No sé, como estamos nosotros igual.
A: A ver, esto es complicado: si hay que hacer un proyecto de… un primer paso… hablamos de actividades físicas o más complejas, como fue el desmontaje de una nave industrial para obtener materiales con los que luego diseñar y construir el aula. Para esto hubo una exigencia legal muy grande de elaborar un proyecto de desmontaje, un plan de seguridad y todo esto, todos esos documentos se hicieron, se entregaron, se supervisaron por la Universidad y se aprobaron. A la hora de montar el aula: el proyecto de montaje está hecho, el proyecto de seguridad está hecho y entregado.
M: ¿Entregado a quién?¿A la Universidad?
A: A la Universidad, como estamos trabajando dentro de una institución pública no hace falta que nuestro proyecto pase por el Colegio de Arquitectos, porque la propia Universidad puede visarlo, hay una oficina técnica que puede supervisarlo. También hay que analizar lo que estamos montando y tanto lo vuestro como lo nuestro, son espacios desmontables, trasladables, entonces sí que hay ciertos huecos y ventajas legales que hay que conocer muy bien y defenderlos. Al no estar fijados al suelo de una forma permanente, los puedes trasladar sin que haya daño al bien inmueble sobre el que están depositados, o sea, nuestros espacios entrarían en la categoría de bines mueble, creo que la instalación de un módulo como el vuestro es equivalente al depósito de un armario en un solar, pero de estas cosas el especialista es Santi. Así, no hay otra… Aulabierta te la puedes llevar ¡échale tiempo y ganas de desmontarla! que el terreno queda sin daños. Y sobre los permisos: lo que ha sido muy importante y lo hemos estado hablando un poco antes también, es hacer las cosas bien, o sea, esto es una experiencia de autoaprendizaje y por lo tanto hay que saber muy bien cual es tu interlocutor, en este caso puede ser la administración, desde una institución civil hasta un centro educativo, y ellos van a tener exigencias contigo, o sea, lo que tengas que hacer lo tienes que hacer muy bien, atendiendo a formalismos, a cuestiones legales. Eso nos ha preocupado mucho desde el principio, decíamos: vamos a conocer cuales son los procedimientos habituales para realizar cualquier tipo de proyecto, cuales son las exigencias y vamos a cumplirlas todas, una por una, para que por nosotros, por un fallo nuestro, el proyecto no siga adelante, que sea por una decisión de otro tipo. Aún queriendo hacer las cosas bien hay cosas que nos salen regular.
M: Tampoco las conoces, a veces.
A: Bien, en realidad, la actitud siempre, desde el principio, con este proyecto y aún hoy, y eso es lo que más me gusta, es que lo afrontamos de una forma muy ingenua, o sea, para nada conocíamos nada de esto, nada, nada. Se podía haber hecho de una forma más ágil, más eficaz, pero es que nadie teníamos la experiencia; sólo Santi, pero en lo que respecta a los modos de negociar o intervenir en la Universidad creo que éramos bastante vírgenes. El proyecto pretende que los participantes en él adquieran la potencialidad para diseñar el modo en que quieren conocer aquello que no conocen, en nuestro caso buscando la forma de insertarnos dentro del propio sistema educativo, del propio ‘diseño’ pedagógico, de la gestión de programas. Como ves, va más allá de la autoconstrucción. Hemos intentado que cada paso de la autoconstrucción, cada una de sus fases, convertirla en una actividad formativa, en cursos, y que la Universidad los reconozca y legitime como actividades académicas concediendo por ellas créditos de libre configuración. O sea, que se incorporan nuestras actividades al expediente académico. Todo esto hay que experimentarlo y aprender a hacerlo. Nuestras propias carencias, lo que han hecho… que es lo que tienen estos proyectos, que con ellos analizas tus debilidades y te ayudan a resolverlas, eso de algún modo se está produciendo. Evidentemente, la gracia de todo, y vuelvo a lo del principio, es lo de la ingenuidad. Si sabes cual es el camino, primero: tiene poco interés, y lo segundo: no acabas por llegar a nada nuevo, ahora si vas un poco con una actitud como decimos nosotros de… bueno, es que no te queda más remedio, vas echao p´alante, vas tomando decisiones que en muchos casos son temerarias y arriesgadas, pero es lo divertido e interesante.
M: Pero el hecho de construir ¿no empezó a generar problemas entorno a la seguridad, que se produjese un accidente… o…? porque supongo que habría mucho movimiento allí en la facultad: vosotros construyendo y nadie… ¿o no?
A: Yo no he tenido nunca la sensación de que el proyecto, desde dentro, sea seguido o valorado, yo creo que ha sido más bien ninguneado.
F: Eso a veces es una ventaja.
A: Ahora si que está viniendo gente que no ha seguido el proyecto y que empiezan a realizar preguntas muy suspicaces. Un profesor, me contaba hace poco Jesús [se refiere a Jesús Pérez, otro de los responsables de Aulabierta] le vino diciendo: “Oye ¿esto lo tenéis bien legalizado, tenéis un proyecto y todo esto? Porque a mi me preocupa mucho la salud, la seguridad de los estudiantes de BB.AA. y quiero saber si esto se nos cae”. De repente a la gente le sorprende que lo hayamos levantado y dice “¡hostia, qué es esto?!” (evidentemente nosotros nos hemos asegurado de que no se caiga, como si no nos preocupara nuestra seguridad!) pero ya vemos ciertos recelos y sospechas sobre el aula.
Siempre hemos tenido muy en cuenta, y además hemos sido muy conscientes de que debemos tener soluciones preparadas para cualquier problema. Si surge cualquier tensión, si hay algún tipo de requerimiento, nosotros tenemos que estar muy preparados para actuar de forma inmediata. Si un profesor nos viene con historias de “¿aquí hay un proyecto técnico?” rápidamente lo tiene disponible. Al final la ingenuidad es lo que ha hecho que nos formemos, y al final nos ha generado lo contrario, la previsión, es decir, estar preparados para cualquier tipo de problema que pudiera surgir. De hecho tenemos convocada una entrevista con la vicerrectora y como que ya prevés su reacción.
A mi, en los tres años que llevamos trabajando en Aulabierta, desde 2004, la verdad es que hemos llegado a tener una capacitación que para nada nos ofrecían los propios estudios; hablo del caso de arquitectura por ejemplo, o sea, un conocimiento legal, por el hecho de tener que llevar a cabo la práctica, o un conocimiento que parece anecdótico, de medidas de seguridad, que lo ves de una forma pasajera durante la carrera, aquí ¡hostia! en cierta forma te estás jugando que se te caiga un martillo encima, tienes que estar preparado para eso. Y por ejemplo, en ese caso hemos diseñado cursos de formación, de seguridad y salud y todo esto. Lo que hacen este tipo de actividades es complementar la enseñanza que da la Universidad o, de hecho cubrir sus lagunas, sus carencias, esto se debe entender fácilmente, debemos ser ágiles y estar preparados para saber explicarlo bien, con claridad. Yo no he tenido miedo en ningún momento por la seguridad, si mucho respeto.
M: Más que nada que hubiese podido ser una de las razones que hubiera podido utilizar alguien para paraos, para parar el proyecto. Bueno, claro, el hecho de que la indiferencia es guay, nosotros también hemos hecho muchas cosas desde el área de la educación artística porque nadie le presta atención y como no le presta atención tú vas haciendo.
A: Como si fuera un área residual. Te digo, no es que no nos hubiera respaldado nadie, al contrario, pero bueno ya se sabe. Insistiendo en el tema de la seguridad, ya lo he comentado, tanto Recetas Urbanas como AAABIERTA hemos elaborado cualquier tipo de dossier, cualquier tipo de proyecto técnico que hiciera falta. Y además de una forma creativa lo que ha ayudado a ir siempre un poco más allá. Por ejemplo, había que elaborar un proyecto de seguridad para el desmontaje de la nave industrial y después para el montaje del aula, pues el estudio de Santi elaboró unos manuales gráficos de desmontaje y montaje muy claros y útiles, una especie de manual de instrucciones o ficha didáctica, que servían para potenciar mucho más nuestro interés por la seguridad. Eso, por ejemplo, ha conseguido convencer a las instituciones con las que hemos trabajado, la seriedad que hemos demostrado en todo este tipo de procedimientos; si ellos consideraban que la seguridad, por ejemplo, es importante, nosotros demostrábamos con lo que entregábamos que para nosotros era incluso más. Hemos demostrado una preocupación máxima en ese caso e incluso éramos propositivos, es decir, vosotros planteáis un problema y nosotros siempre dábamos opciones para salvarlo, fórmulas que la institución no había pensado.
M: Para nosotros, claro, diciendo tu eso pienso: si para mi cuando nos ponen pegas al espacio se plantea que es un espacio vulnerable, o que es un espacio no vigilado… ¡yo nunca podría poner medidas como para supervigilar el espacio! A vosotros, supongo que por la indiferencia, no lo han llegado a requerir.
A: Hay exigencias de seguridad.
M: Sí, pero de vigilancia del espacio, de que pueda ser un espacio…
F: Claro, uno de los problemas es “¿Qué se va a hacer ahí?¿Qué va a pasar ahí? Y eso tiene que estar supervisado, controlado y vigilado” y eso tú no lo puedes… ¿cómo se lo devuelves…?
A: Pues con previsión. Yo recuerdo de los primeros proyectos técnicos que ellos además de insistirnos en la cuestión técnica, nos preguntaban sobre los usos: para qué iba a servir aquello, qué se iba a hacer allí dentro. Ángel Avidad, arquitecto de la Universidad, cuando le entregamos el dossier técnico nos lo dijo: “Bueno, es que nuestra duda es qué se va a hacer allí dentro”. Pero bueno, ante esa duda: un programa. Un programa de uso, un programa de actividades. Los usos del aula no van a ser propuestos desde la dirección de la facultad, sino consensuados por el alumnado.
F: Pero que tengan valor académico.
A: Sí, a ver: valor formativo tienen, valor académico es que haya una legitimación por parte de la facultad, o sea, que den créditos. Nosotros siempre hemos explorado esa vía (también otras), le dedicamos mucho tiempo a este proyecto y lo que quieres es rentabilizarlo también. Entra dentro del objetivo de diseñar parte de la rama curricular de la libre configuración de tu expediente académico.
F: Que eso es lo que no se entiende que puedan hacer alumnos de secundaria. Se entiende que no son capaces de diseñar su propio currículum.
M: Pero también hay, más allá de que sean o no sean capaces de diseñar algo, creo que hay no puedes… porque es una percepción muy subjetiva, pero hay una cosa muy objetiva que es la ‘responsabilidad legal’ de una persona de 16 años, ahí es donde todo el rato gira el eje de…
F: Ya, pero bueno, ese es el argumento legal para negarte que ellos ‘tienen’ la capacidad de hacerlo.
M: Es para negar el poder de decisión. Pero no ya para decidir sobre el curriculum, sino para decidir sobre cualquier cosa. Si yo tengo que estar en un espacio no sé cuantas horas, vigilado y sin poder salir de ahí porque tengo 16 años es como… es que ya da igual, no es ya que no pueda decidir sobre mi curriculum, no puedo decidir dónde estoy. Para mi eso es muy bestia dentro del sistema.
A: Yo no sé cómo estará el sistema dentro de secundaria, pero nosotros si que nos hemos preocupado de estudiar los estatutos de la Universidad, cuales son sus objetivos, y en relación con el alumnado dice: “valoramos positivamente y potenciaremos la participación del alumnado en las labores discentes”.
F: Si, esto es ya un lugar común de las políticas educativas.
A: Eso lo hablábamos antes ¿se cumple o no? En nuestro caso, en la Universidad, creo que, aunque se potencie, a nivel académico si hablamos de curriculum, para nada puedes participar. Eso lo sabemos, pero ante esa situación lo que decíamos: “vamos a buscar soluciones creativas”. Ya sabemos que para ellos, en este aspecto no tenemos decisión, más allá de participar en un consejo y tal, pero no podemos llegar a proponer, bueno…, pues sí podemos llegar a proponer ¿Cómo se puede hacer esto? Profesorado afín. Ninguno de nuestros cursos podíamos firmarlos nosotros como directores, nosotros como alumnos no podemos tramitar la concesión de créditos de ninguno, pero si consta en la dirección un profesor, sí.
F: Eso es algo que veo claro con projecte3*, que tenemos que buscar profesorado afín y cuando decimos lo de co-gestión del espacio me refiero a que ‘los profesores’ tienen que co-gestionar ese espacio, porque si no es imposible, no tendrá validez académica, no tendrá…
A: Y una de las cosas que más me preocupan a mi y que os puede preocupar también es la perdurabilidad del proyecto.
F: Sí, porque en el momento en que salgamos de ahí se ha acabado projecte3*, tenemos que buscar esos apoyos.
A: Cuando el grupo que forma AAABIERTA salga de la Universidad porque ha terminado sus estudios ¿quién sigue con esto? Nosotros hemos tenido un problema y es que la delegación de alumnos de BBAA estaba un poco desestructurada aunque ahora, empieza a funcionar, el objetivo es que esto se convierta en un proyecto conjunto de todos los estudiantes. Evidentemente la asociación ha hecho un esfuerzo muy grande por construirlo y por diseñarlo pero nos hemos dado cuenta que quién va a perdurar va a ser el profesorado y delegación de alumnos (esté quién esté dentro) van a ser los que van a estar en esta facultad, entonces, evidentemente, tienen que hacer suyo ese espacio y ese proyecto; el espacio tanto físico como el digital, facilitarles todas las herramientas que hemos diseñado nosotros como autoaprendizaje, explicárselas, enseñarlas y decir: “vamos a…”.
F: Respecto a eso nos comentaban que no todo el mundo lo veía tan claro y gente que había participado en el proyecto quería agenciárselo para ellos, como que era una cosa exclusivamente suya y no dejar participar al resto de la facultad. Hay momentos en que los chavales de projecte3* también tienen esa reacción: “No, esto es nuestro y aquí no va a entrar nadie más”.
A: No de una forma tan exagerada, pero incluso yo he sentido apego al sillón, como se suele decir en gestión política, …claro, dices “¡Joder, he estado dos años en esto…” pero te tienes que reciclar y decir “¡Tío! ¿en qué proyecto has estado trabajando?¿de qué va esto?, has decidido trabajar en grupo y favorecer la participación”. Puede ser que Aulabierta sea aún un aula “entreabierta”, que no se ha comunicado bien. Creo que lo que tenemos son problemas de comunicación del proyecto.
M: Nosotros también los tenemos.
A: Y hacemos un esfuerzo tremendo por averiguar cual es la mejor forma de abrirlo, pero creo que no estamos formados en ello… la educación universitaria que tenemos no ha favorecido la creación de proyectos en grupo. Da mucha satisfacción decir: “este aula la he hecho ‘yo’, pero a la vez esto cierra… “bueno, vale, esto lo hemos hecho nosotros, pero lo que nos interesa es que éste que viene el último día puede engancharse y darle continuidad”.
M: Respecto a lo de hacer público el proyecto, por ejemplo para nosotros era superimportante que todo el centro supiera lo que estaba pasando y se intentó hacer cuando vinieron María y Ppda [María García y José Daniel Campos, miembros de Catarqsis junto a Carlos Gor] en aquella reunión en el hall y, por ejemplo, el profesorado no sabe lo que está pasando y para nosotros era vital que todo el mundo fuera consciente y pudiera aportar cosas al proceso y el proceso se ha quedado muy endogámico y no sabes qué herramienta podías haber utilizado para abrirlo. Por ejemplo, ya no sólo al centro, porque una idea era abrirlo al barrio, porque la idea era que lo que pasaba en la escuela se conociera fuera. Ahora, cuando estamos haciendo la deriva, es una herramienta para conocer el barrio y para que te conozcan a ti, o sea, actúas por los lados y se pregunta ¿y tú quién eres?¿tú de dónde vienes y qué estás haciendo? y entonces vas explicándole a todo el mundo lo que estás haciendo. Y hemos empezado ahora a hacer la deriva pero me doy cuenta de que es una herramienta bastan te potente para conocer y que te conozcan.
A: Sí, en nuestro caso también es un interés hacer de la universidad un lugar permeable, poroso en proyectos como zonachana que une este espacio que hemos creado dentro pero también con el barrio que acoge a la propia facultad de Bellas Artes, La Chana. Hemos hecho esfuerzos pero también nos hemos dado cuenta que en la comunicación hay un código y que ese código, el nuestro y el de la gente, tampoco es que sea compartido, un caso concreto, cuando presentamos este proyecto AAA en el inicio al departamento de pedagogía visual… tiene un nombre extraño ahora no me acuerdo bien, para pedir una subvención, un apoyo, nos dijo que realmente no veía que relación tenía el proyecto de Aula Abierta con su departamento. Entonces por una parte dices, bueno o ellos están ciegos o soy yo que no se hablar, hay aquí un problema de comunicación porque evidentemente nuestro proyecto si que es trabaja en su ámbito, planteando una revisión de las formas y de los contenidos de la educación Bellas Artes o la Arquitectura y de otras disciplinas.
M: Si, yo creo que en nuestro caso también es eso que los códigos, los lenguajes son diferentes y entonces no podemos…
F: En nuestro caso el profesorado del centro no es un organismo, si no que cada uno es autónomo. Entonces es bastante difícil. En Centros como el Prat de la Manta, tu hablas con el director y entonces el director se encarga de hacerlo público a todo el centro porque para ellos es importante que todo el mundo esté informado, y un centro normal pues no.
M: Pero lo mismo que pasa con el alumnado, que es individualista y que cuesta trabajar en grupo, pasa con el profesorado que sólo se encarga de su clase, da su hora, prepara su materia… pero no están acostumbrados a trabajar en grupo, yo doy lengua y tu das inglés, y yo no sé lo que tú haces y tú no sabes lo que yo hago.
F: Sin embargo, los profesores están convencidos de estar muy unidos y de que trabajan en equipo.
M: Que haya una unión en cuanto que todos son docentes, pero cada uno lleva su materia y su historia y no se hacen híbridos y se juntan intereses o.. no sé, que no están acostumbrados, a lo mejor sería necesario que se hicieran proyectos con los profesores trabajando en conjunto; que todos los profesores, el de lengua, el de historia, diseñen…
F: Un espacio [risas]
M: O que se ayuden entre ellos para yo que sé.. para que den un clase por ejemplo, una cosa tan sencilla. pero están acostumbrados todos los días … no hay…
A: Si es como la escenificación. En nuestro caso, conocéis el edificio de bellas artes ¿no? Veis la estructura que tiene ¿no?: Bueno seguro que Pablo os lo explicó es un antiguo hospital psiquiátrico y su diseño es laberíntico, su función era la de disgregar, no era unir, celdas estancas a lo repartidas en largos pasillos. El caso es que se convierte en Facultad de Bellas Artes, y se instalan los departamentos, las áreas de conocimiento, pintura, escultura…se implementan pero de ocupando cada una un lugar muy diferenciado del resto, vuelven a estar separadas, tu dices bueno hoy en día las artes tienden a converger en ningún caso a separarse ¿no? Todo el concepto de arte es híbrido por naturaleza y fíjate que metáfora nos da nuestro el edificio de BBAA para con la academia. Digo esto, por lo que hablabais de proyecto común, en la Facultad de Bellas Artes de Granada, una de las sensaciones que yo he tenido desde dentro es que nunca ha tenido un proyecto común, otras facultades si parece que lo tienen, aunque tengan sus tensiones internas y todo esto. pero hay algunas que dices, esta va de esto, esta tira por aquí. Granada nunca, yo creo que hay tanta tensión interna que no hay un proyecto que ilusione y que aune fuerzas. Aulabierta queríamos que fuera un proyecto que apoyara el centro y sirviera para crear un espacio de comunicación, de debate y encuentro de todos los sectores de la facultad, también contagiar a otros centros, pero está difícil.
F: Yo no sé si deberíamos… bueno nuestro caso es diferente, nosotros podemos elegir a donde vamos. Yo creo que deberíamos seleccionar un poquito donde vamos a hacer las cosas, hay sitios donde es posible y donde no es posible por las dinámicas internas, aunque todos los centros se parecen mucho pero… también depende de las personas que estén al cargo.
A: Y también el proyecto, o sea organizar un seminario de cine con palomitas es mucho más factible, más fácil de gestionar que replantear la propia estructura del centro.
F: Incluso dentro de esto a lo mejor hay algún centro que está más predispuesto a cuestionarse, por los motivos que sea. Pero es verdad si haces un cursillo de pintura al natural pues todo es más fácil…
A: Yo creo que en lo institucional hay pocas posibilidades para interactuar.
M: Bueno yo creo que ese pedazo de aula es una interacción bastante potente.
A: Si pero al fin y al cabo fíjate que los problemas de los que estamos hablando es que de nuevo está como aislada.
M: Sí pero has materializado una iniciativa del alumnado, quiero decir, si eso se ha podido hacer es que se pueden hacer otras cosas. Abres una puerta, muchas veces el problema es que esto no se puede hacer porque no se ha hecho nunca, pues no, ya se ha hecho. Para mí es mucho aunque luego tenga todos los problemas a nivel de poder estructurarse o que muchas de las líneas que uno ha marcado no se hayan conseguido pero hay otras que están ahí.
A: Evidentemente el caso de Aulabierta es un precedente, en la universidad, en nuestra facultad, por supuesto, incluso que trasciende un poco nuestro ámbito. El objetivo era adquirir potencialidad y se adquiere por la fuerza y por el deseo de hacer, no porque tengas ni la capacitación, ni la preparación, ni porque tengas los medios. Ninguna de esta tres cosas las teníamos, no estábamos preparados ni mentalmente, ni físicamente y tampoco teníamos los medios para hacer lo que hemos hecho, medios materiales e incluso humanos, porque el proyecto parte de cero, de unas personas que se reúnen, pero que pronto empieza a crecer, eso es magnífico, pero no se tenía nada. De hecho no se partía de un presupuesto, que es una de las cosas que me encanta de este proyecto, no hay un presupuesto que tengas que gastar para hacer un proyecto, no, hay un proyecto que tiene que salir a todas todas y que tienes que buscar la forma de encontrar financiación paso a paso, según requiera o aparezca un problema. Surge una necesidad, buscamos una solución. El especialista en esto es Santi.
M: El nuestro es así, él [Francisco] critica esa forma de actuar.
F: Ya, pero es que el contexto también es diferente, porque ellos son un grupo de gente que tienen unas circunstancias y emprenden una acción…
M: Pero para mi esa forma es una de las vías que asegura que no sea un proyecto cerrado, que no es una cosa cerrada. Porque cuando tu buscas, cuando tu tienes un dinero y luego ya lo…
F: Ya, pero hay márgenes también. Nosotros nos ponemos a trabajar… nosotros nos somos un…
A: Quiero entender lo que dice Francisco…
F: Nosotros tenemos una forma de vida, un medio de vida a través de nuestro trabajo, ellos no…
A: No, no. Directamente no.
F: Incluso lo quieren rentabilizar a nivel académico ‘por lo menos’, porque están realizando un trabajo y un esfuerzo enorme, nosotros tenemos que rentabilizarlo y claro, lanzarse a un proyecto que la financiación te va a costar 24.000 euros, por ejemplo, sin tener cero asegurado, claro, es un poco suicidio. Lo puedes hacer una vez ¡pero no siempre!
A: Y de hecho yo he podido estar muy cerca del proyecto porque tengo una beca que me cubre, y he podido dedicarle mucho tiempo a este proyecto porque de ahí parte mi proyecto de investigación, que es que si no…. Si afrontara esto como un proyecto profesional sería distinto para mí. … pero me parece interesante que el proyecto se haga en las condiciones en que se está haciendo, lo que acabamos de hablar. Yo a lo mejor no estaría en las circunstancias o condiciones de poder permanecer en algo así, porque bueno, la vida se me cae, la realidad se me cae encima…
F: Es que a nosotros no se nos puede caer encima… [ríe]
A: Yo ahora tengo mi beca pero termina dentro de un año y ¿qué te crees que pasará? yo ya no me puedo plantear… Ahora sí que estoy cogiendo proyectos de los que no obtengo beneficio económico… ¡pero es que los próximos! Ahora puedo gestionar lo que me apetece o divierte, pero yo dentro de un año ya no podré permitirme dedicar tanto tiempo, del que no conseguiré remuneración, a esto; por ahora busco otras formas de rentabilizar mi trabajo. Claro, es lo que me decías tu por mail el otro día, lo que hablábamos de… esto [se refiere a el propósito expreso de LaFundició de remunerar, modestamente, a los colaboradores del fanzine de projecte3 y a la necesidad de modificar hábitos de precarización y explotación de los trabajadores culturales ampliamente extendidos en la industria] eso es evidente para mucha gente, debería estar claro.
F: Sí, mucha gente.
A: Lo de… es que óstia,… lo típico de que en una expo cobren todos menos tú, para ti la repercusión pública, dicen; ¡pero qué me estás contando!?; lo que pasa en mi pueblo: “Trae unos cuadros para una expo en el Centro” y es que ni se dan cuenta: “Pues no te traigo cuadros (ni tengo cuadros, que mal explico lo que hago), porque tú como técnico de cultura estás cobrando de la programación que yo te hago y yo sin embargo ¿qué?”, conformarme con salir en prensa y a ver si alguien me compra algo, no?. O sea que no, que no funciona así la cosa. Evidentemente el proyecto Aulabierta tiene otras circunstancias…
F: Entonces lo de la herencia era mentira.
A: Completamente. [ríen] Soy absolutamente pobre y me pesa, lo que estoy es buscando una herencia, de hecho mi chica, Marta, tampoco la tiene y estamos pensando en romper, porque los dos pobres no tiramos ‘palante’. Menos mal que está el cariño.
M: Como Truffaut que se casó con una ‘pija’ para poder hacer las pelis. El padre le puso una productora.
A: No, está muy bien, claro [rien] el capital hay que moverlo y transformarlo.
M: Y encima lo explicaba en sus películas.
A: Yo estoy un poco así, la verdad, en esa historia. Es que no nos puede afectar… somos los más precarios de todo el sistema, somos los últimos aunque los que generan todo… o sea, todo esto se mueve porque hay unos señores y unas señoras que hacen cosas, que aportan creatividad y que aportan conocimiento al mundo, y justamente son los que no… los últimos de la cadena: eso se cae por ahí, se nos cae [ríen].