Camerún toma su nombre de los camarones del río Wouri, navegado por los colonos portugueses que se asombraron de ver tantos animales en sus aguas.
El protagonismo de este crustáceo llega a su cocina, y así lo pudimos comprobar en esta taller de cocina camerunesa donde Bekas, procedente de la Asociación Camerunesa de Cataluya, compartió con las vecinas el plato estrella del país: Ndolé.
El protagonismo de este crustáceo llega a su cocina, y así lo pudimos comprobar en esta taller de cocina camerunesa donde Bekas, procedente de la Asociación Camerunesa de Cataluya, compartió con las vecinas el plato estrella del país: Ndolé.

El ndolé es un plato muy nutritivo y de origen humilde; cocinado en las zonas rurales para dar energía a las trabajadoras del campo, se acaba popularizando en las ciudades y pasa a convertirse en una comida sofisticada y para adinerados bolsillos. En esta ocasión, hicimos la versión popular 😉 sin gambones pero con gambas. Su nombre procede de la verdura ndolé, muy similar a la espinaca, aunque más amarga; es necesario lavarla varias veces para disminuir su sabor. Este amargor mezclado con el ahumado de los camarones se traduce en una mezcla explosiva de sabor!

Al tiempo que Bekas presenta la receta, con cacahuete molido (que ya habíamos probado en la cocina quechua), cebolla, ambas, pescado seco, carne de ternera, arroz, camarones, aceite y, por supuesto, el ndolé, las vecinas iban conversando sobre sus culturas gastronómicas. Se reconocen las similitudes, diferencias, préstamos e influencias entre cocinas como las de: Camerún, Guinea, Ecuador, Perú, Colombia, Brasil, Bolivia, Chile, Catalunya, Gabón, Mali…
Removiendo removiendo, esperando que la mezcla hiciese chup-chup, se cocinan temas como el de las tiendas que venden productos específicos de estas culturas, la falta de referencias en los mercados, la cultura de la cocina comunitaria… acabando con más preguntas e inquietudes. ¿La práctica de cocinar para otras, tan común en otros lugares del mundo, es posible y qué requeriría en una ciudad de adn migrante como L’Hospitalet?
Reactivando los mercados con deliciosas jornadas y encantadora gente. ¡Seguimos!
