BITÁCORA SEMANA DE COSTURA

La semana del 13-17 de mayo fue protagonizada por las mujeres del taller de costura de Mujeres Palante, que se desplazó al mercado de Torrente Gornal.

Primero subimos la persiana del Trajín con el taller de «dobladillo». El objetivo era dar lugar a entidades de la Economía Social y Solidaria en los mercados, en prueba de lo que sería si pudieran dar uso a alguna parada de todas las que hay vacías. El aprendizaje de la costura, que es algo que las nuevas generaciones desconocen, es una herramienta básica para deshechar menos ropa y reutilizar más.

El sector de la ropa sostenible tiene difícil generar piezas que sean responsables con la naturaleza y accesibles a todos los bolsillos, por eso la clave recae en las consumidoras… ser conscientes de lo que vestimos y cómo fue fabricado, apostar por la cercanía y dignidad de las trabajadoras, y reducir reducir y reducir el derroche y gasto de ropa. De ahí que, con aguja e hilo como herramientas, recuperamos los buenos saberes de nuestras abuelas y cogemos el «dobladillo» a los largos de nuestro consumo.

La semana culminó con el desfile de ropa que se ha ido tejiendo en el taller que actualmente tienen en Torrassa. Este espacio es lugar donde se ejercita el ir haciendo por sí mismas, a la vez que se tejen redes de apoyo que refuerzan el día a día de cada mujer. La mayoría han sido durante muchos años cuidadoras; aquí se da puntada con hilo a los rotos del cuerpo y mente que cada una viste. Como por ejemplo Pura, o Fátima, que dice:
«Buscamos maneras de que una mujer pueda hacer cosas por sí misma. En el taller de costura, hacemos todo por nosotras mismas. Nos dan el material y nos ponen un ejercicio para poder ir aprendiendo. Trabajamos constantemente, pensando en la tarea que estamos haciendo, pero sobre todo, ayudándonos entre nosotras. La cooperativa para mi es amistad, trabajo y ganas de aprender.»

Toda la ropa que se diseña es única y a medida; así se escapan de las medidas estándar que nos aprietan o condicionan. Es cuestión de darle la vuelta al modelo: necesitamos tallajes reales; deseamos piezas que se adapten a los cuerpos, y no al revés. Tanto prendas completamente originales como customizadas, pues en los detalles radica la diferencia. Así, seguimos apostando por no continuar derrochando recursos y dar segundas posibilidades a la ropa! Rediseñar, reutilizar, revivir, resistir…

El taller de costura de Mujeres Palante tiene cara y ojos, con historias remendadas que añaden una capa más de amor a la ropa que de sus manos sale. Aquí añadimos el enlace a su facebook, donde podréis encontrar las voces protagonistas de toda esta historia.

https://www.facebook.com/JuntasPalante/

Aquí foto de la comida rica que preparó la cooperativa de catering. Autoorganizadas, autoempleadas! Avanti!

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